15-m nuevas formas, democracia 2.0

Llevo tiempo -como otros muchos- viendo que se cuece algo, especialmente gracias a internet (ver por ejemplo mi charla sobre Wikileaks). Afirmo desde hace tiempo que pasará como las termitas, que no se ve el tronco carcomido hasta que se derrumba. Pasó hace poco con Wikileaks, habrá un antes y un después en el sector de la información. Ha pasado con los países árabes.

Por mucho que se esté manipulando el movimiento 15-m, desde dentro y desde fuera, me parecen muy cortos de miras quienes no se dan cuenta ya de que internet está cambiando todo. ¿Quién iba a pensar que la Ley Sinde articularía algo que ha eclosionado en modos y formas tan diferentes?

No faltarán quienes hagan partidistas las reclamaciones de ese indefinido movimiento. Yo mismo no comparto el tono y finalidades que ha pasado a tener en su formato no virtual. No faltarán partidos y medios de comunicación para reabsorver, reconducir o disolver este movimiento en otras cosas. Pero habrá un antes y un después. Pase lo que pase con este 15-m.

Aunque sea para que nada cambie, todo acabará cambiando.

Dice el gran experto en estos temas con quien he coincidido varias ocasiones, Orihuela que «Me dicen que revolución «queda grande» y que «es exagerado», pero tenemos una «revolución 2.0″ en toda regla» afirma que de Política 2.0 pasamos a Democracia 2.0.

Es un error, que yo mismo he cometido, mirar las finalidades políticas del movimiento. Esto es, o puede ser, como el Tea Party (por muy conservador que sea), no se trata de la finalidad que pretendan, sino la nueva forma de hacer política en la red y para la red, fuera de las estructuras de partidos y de los medios de comunicación.

De hecho, como decía en mi anterior comentario, creo que su lugar natural es la red y ahí volverá.

Y quien no se quiera enterar, es que no se está enterando de lo que pasa en la «calle» de internet, que es sólo la calle del 75% de la población, ahí donde todos nos sentimos un poquito más libres.